En sus teléfonos se encontraba el detalle de sus vidas.
En su pasado, las respuestas a sus preguntas.
JFK, Nueva York. Madeleine y Jonathan se cruzan en un restaurante del aeropuerto. Un sándwich cae al suelo, una Coca-Cola se derrama y una breve discusión tiene lugar... Es solo un instante, pero marcará el rumbo de sus vidas.
Al llegar a casa, ella a París y él a San Francisco, descubren que han intercambiado accidentalmente sus smartphones. Ninguno de los dos puede resistir la tentación de curiosear en la intimidad del otro, y lo que averiguan es absolutamente revelador: aunque les separaban diez mil kilómetros, hacía tiempo que el destino les había unido sin ellos saberlo. Reaparece un misterio del pasado (un caso sin resolver) y lo que habían empezado como un romance se convierte en una persecución que los dejará sin aliento.
Mi comentario:
Empecé a leer este libro sin haber oído hablar nunca de él y sin ninguna referencia. Lo tenía archivado en mi ebook (creo que se dice así) entre otros igualmente desconocidos. Simplemente me guié un poco por la sinopsis y me pareció que podía estar entretenido.
El arranque de la novela es exactamente como una comedia americana de enredo. Un hombre y una mujer tropiezan literalmente uno con otro en la cafetería del aeropuerto y en el barullo cambian sus teléfonos que en el choque habían salido despedidos. Y se dan cuenta cuando están a miles de kilómetros uno del otro ¿?. A través de los móviles se comunican, discuten, se reprochan... en fin, todo bastante típico y previsible.
Algo mas avanzado, el libro adquiere pretensiones de novela negra y se vuelve absolutamente inverosímil. Una historia llena de casualidades. Unos móviles que contienen la vida entera de las personas. Demasiadas cosas entrecruzadas. Me ha parecido pretenciosa y embarullada.
Al mismo tiempo, a mi parecer, el estilo es bastante simplista y sus descripciones se disipan empeñándose en darnos los nombres de todas las calles por las que van circulando los personajes, tanto de París como de San Francisco no sé si porque deberíamos conocerlas o para que nos molestemos en buscarlas en los mapas respectivos. ¡Qué pereza!
Por otro lado hay un uso y abuso de frases y adjetivos en ingles, sin traducción, tanto, que varias veces tuve intención de abandonar su lectura. No lo hice porque no me gusta dejar un libro sin terminar y porque siempre tengo curiosidad por saber como remata el autor la obra.
En fín, yo os diría que con la cantidad de libros que hay, no perdierais el tiempo en éste, pero si queréis, leedlo y juzgad por vosotros mismos.
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Ahora voy a leer: "La chica del tren"
Empecé a leer este libro sin haber oído hablar nunca de él y sin ninguna referencia. Lo tenía archivado en mi ebook (creo que se dice así) entre otros igualmente desconocidos. Simplemente me guié un poco por la sinopsis y me pareció que podía estar entretenido.
El arranque de la novela es exactamente como una comedia americana de enredo. Un hombre y una mujer tropiezan literalmente uno con otro en la cafetería del aeropuerto y en el barullo cambian sus teléfonos que en el choque habían salido despedidos. Y se dan cuenta cuando están a miles de kilómetros uno del otro ¿?. A través de los móviles se comunican, discuten, se reprochan... en fin, todo bastante típico y previsible.
Algo mas avanzado, el libro adquiere pretensiones de novela negra y se vuelve absolutamente inverosímil. Una historia llena de casualidades. Unos móviles que contienen la vida entera de las personas. Demasiadas cosas entrecruzadas. Me ha parecido pretenciosa y embarullada.
Al mismo tiempo, a mi parecer, el estilo es bastante simplista y sus descripciones se disipan empeñándose en darnos los nombres de todas las calles por las que van circulando los personajes, tanto de París como de San Francisco no sé si porque deberíamos conocerlas o para que nos molestemos en buscarlas en los mapas respectivos. ¡Qué pereza!
Por otro lado hay un uso y abuso de frases y adjetivos en ingles, sin traducción, tanto, que varias veces tuve intención de abandonar su lectura. No lo hice porque no me gusta dejar un libro sin terminar y porque siempre tengo curiosidad por saber como remata el autor la obra.
En fín, yo os diría que con la cantidad de libros que hay, no perdierais el tiempo en éste, pero si queréis, leedlo y juzgad por vosotros mismos.
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Ahora voy a leer: "La chica del tren"
Pues muchas gracias por la información, porque con la cantidad de libros que hay para leer y el poco tiempo que tenemos...
ResponderEliminarYo estoy leyendo Hombres Buenos, de Perez Reverte. Lo acabo de empezar y tiene buena pinta. Me lo regalaron en mi cumple y ya tenía ganas de cogerlo. De momento, lo recomiendo. Ya te lo dejaré para que lo leas y lo "destripes" como tú sabes hacerlo...
Hola Anónimo: Te agradeceré que me prestes Hombres Buenos, pues me gusta Perez Reverte y este libro lo tengo en la lista de pendientes.
Eliminar¡Ah! y yo no "destripo" los libros, jajaja ¡Dios me libre!,tengo mucho cuidado. Me limito a hacer un comentario y decir si me ha gustado. Me encantaría que alguno de los que pasáis por este sitio tambien hicierais algún comentario sobre los libros reseñados, si los habéis leído.
Gracias por visitar este rincón.