DULCE DE MEMBRILLO

     Con la llegada del otoño, llegaron productos apetitosos que solo se encuentran en esta estación, como por ejemplo los membrillos. ¿Os gusta el dulce de membrillo?, pues a mí sí, y acompañado de un buen queso, da igual fresco que curado, es un bocado delicioso.

     Pues bien, cuando nos regalan membrillos, de las huertas caseras, claro, que son los que huelen bien (no quiero decir con esto que los que se compran en las fruterías huelan mal, no, simplemente: no huelen) Pues, como decía, cuando nos los regalan siempre hacemos un poco de "dulce".  Y ayer tocó.

     Mi cuñada nos trajo membrillos y nos pusimos manos a la obra. Pepín me preparó los membrillos, yo rematé el trabajo y...

Aquí tenéis nuestra obra  

 ¿Queréis probar a hacerlo?. Pues aquí os doy las indicaciones de como nosotros lo hacemos.

DULCE DE MEMBRILLO

     Solo necesitamos, membrillos y azúcar.

     Escogemos los membrillos que estén sanos, los lavamos bien, ¡¡pero bien!!, incluso con el estropajo porque no los vamos a pelar.

     Sin pelar, los partimos en trozos, como el que parte patatas para guisar, quitándoles el corazón, y los ponemos en una cacerola con algo de agua, a cocer hasta que estén tiernos. Mas o menos media hora cociendo.

     Retiramos la cacerola y echamos el membrillo en un escurridor para quitarle el agua. A continuación lo pasamos por el pasapures, sobre un bol.

     Lo pesamos y lo echamos de nuevo en la cacerola. 

     El mismo peso que nos da el membrillo después de pasarlo, tenemos que echar de azúcar, (aunque yo le echo un poquito menos porque no nos gusta tan dulce). Nosotros hicimos dos kilos y cuarto, mas o menos.

     Poner de nuevo al fuego la cacerola con el membrillo pasado y el azúcar, e ir moviendo y mezclando bien, con una cuchara de palo. En esta fase hay que estar muy pendiente y no dejar de mover, para que no se agarre al fondo. A medida que vaya cociendo se irá poniendo algo mas oscuro. 

     Tiene que cocer, mas o menos media hora, a partir de que empiece a hacer burbujas (que por cierto yo me pongo un guante de cocina porque las burbujas son gruesas y al salpicar pueden quemar).

     Tendremos preparados unos recipientes de plástico que no sean muy altos, untados con unas gotitas de aceite... Pero solo untados. (Yo les paso un papel de cocina )

     Una vez transcurrida la media hora, retiramos del fuego y con una cacilla vamos vertiendo el dulce en los recipientes de plástico. Lo dejamos reposar todo un día para que se endurezca y ya en frío los podemos tapar y guardar.

     ¡¡Espero que os guste!!