Ya es difícil encontrar mas o menos en 50 km a la redonda desde el punto central de San Martín, iglesias que no hayamos visto, aún así yo sigo escudriñando para encontrarlas y llevar a cabo nuestra costumbre de visitarlas la mañana del Viernes Santo. Y encontré unos pueblos de la sierra de San Vicente, que no conocíamos y allá que nos fuimos. Nos hizo un día maravilloso y otro año mas cumplimos con nuestra tradición.
Bien es verdad que no pudimos completarlo porque dos de las iglesias estaban cerradas y el tiempo se nos echó encima, pues los monumentos están expuestos hasta las tres y nos fue imposible sustituirlas.
Os hago un resumen de las que pudimos visitar, empezando como siempre por San Martín:
Os hago un resumen de las que pudimos visitar, empezando como siempre por San Martín:
S. MARTÍN DE VALDEIGLESIAS (Madrid). Parroquia de S. Martín Obispo |
Edificio renacentista estilo Herreriano y planta basilical, de tres naves, cubierta con bóveda de cañón. Destaca el retablo barroco del altar mayor, con un cuadro atribuido a Lucas Jordán, discípulo de Rivera, que representa a San Martín compartiendo su capa con un pobre. En una de las capillas se encuentra el retablo de la Virgen de la Nueva, patrona de la localidad, y la Virgen de la Estrella, una pequeña escultura de marfil, que según la Cántigas, fue propiedad de Alfonso X, el Sabio.
De San Martìn nos fuimos a Nombela, en Toledo
NOMBELA (Toledo). Iglesia parroquial: Asunción de Nuestra Señora. |
Construida a principios del siglo XVI. De mampostería y sillares en las esquinas. En el último cuerpo de la torre se observa una curiosa grabación de caras en la piedra. También destaca en la entrada, situada en la cara sur, el pórtico de acceso de estilo gótico isabelino y un arco carpanel abocinado. Sobre la portada tenemos una decoración estrellada con dos rosetones y en su cabecera está presente la famosa cerámica talaverana.
Continuamos a Pelahustán
PELAHUSTAN (Toledo) Iglesia parroquial: S. Andrés Apóstol. |
Construcción del siglo XVI. La iglesia de San Andrés Apóstol es de estilo gótico tardío. Tuvo ampliaciones durante los siglo XVII-XVIII.
Se compone de una nave única, cabecera poligonal y torre a sus pies. Tiene entrada por dos puertas: la del “Cierzo” y “Sol”. La portada principal se encuentra en su lado sur. Junto a su entrada se encuentra una capilla barroca y destacan diversos retablos datados en los siglos XVII-XVIII. la parte más antigua es la que se une con la torre.
Ha sufrido diversas modificaciones que
han disminuido su carácter monumental
Y de Pelahustan nos salimos de la ruta para visitar El Real de San Vicente
EL REAL DE SAN VICENTE (Toledo) Iglesia parroquial: Sta. Catalina. |
La construcción es de estilo barroco y consta de una nave dividida en cinco tramos. En su interior se custodian diversas joyas en forma de retablo, como el de la Virgen de los Dolores, patrona del pueblo, o en forma de tallas como la del Cristo atado a la Columna o el Cristo con la Cruz a cuestas, ambas obras de Luis Salvador Carmona.
Por fuera merece la pena reseñar su bella torre de base cuadrada realizada toda ella en sillería que aparece adosada a la cabecera del templo, en el lado del evangelio. Alberga la sacristía en su base, rematada por una especie de espadaña de piedra donde se aloja un viejo reloj.
Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1991.
Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1991.
Volvimos sobre nuestros pasos y llegamos a Fresnedilla, en Avila donde encontramos la iglesia cerrada.
Seguimos a Higuera de las Dueñas y, ¡vaya! cerrada tambien.
SOTILLO DE LADRADA (Ávila). Iglesia parroquial: Santísima Trinidad |
Su origen se sitúa en el siglo XV y parece que en tiempos no muy lejanos se encontraba rodeada de cruces de piedra destinadas a la
representación del Vía Crucis.
A lo largo de los siglos, esta iglesia ha sufrido importantes modificaciones:
nada queda de su órgano barroco del siglo XVII, de sus ricas capillas y
cuadros, sus altares, etc.
En 1960 sufre la última remodelación, que sólo respetó la torre y la capilla
mayor con su artesonado mudéjar de 1700, pertenecientes a la edificación
antigua.
Esta capilla acoge, tras un arco ojival de piedra, el retablo mayor del
barroco tardío, con imágenes de San Joaquín, Santa Ana y San José con el Niño.
Y aquí terminamos nuestro recorrido. Volvimos a San Martín un poco desencantados por no haber podido completar las siete estaciones pero con la conformidad de haberlo intentado.
Espero que podamos repetirlo el próximo año.
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