15 de diciembre de 2012

CASI TODO SOBRE MI MADRE XX

     A la búsqueda de las auténticas perrunillas

     Cuando estaba mamá en mi casa, vino un día tia Fe a verla y le trajo unas perrunillas compradas en una tienda de su barrio que, dijo, eran mejor que las que se hacían ahora en el pueblo, aunque estas eran de Ávila. Yo le dije que en "La Bodeguiya", donde compramos nosotros el pan, vendían productos extremeños y también las había visto. Las compré y a mamá le gustaron mas que las otras. Las dos estaban muy buenas pero no eran exactamente como yo las recordaba.



     Ayer fuimos Pepín y yo a comprar embutido a un almacén que hay en el polígono y que tienen productos de Extremadura y de Salamanca. Al ir a pagar lo que habíamos comprado ví en el mostrador unas cajas que llamaban "perrunas" y que tenían absolutamente el mismo aspecto de las de mis recuerdos: buen tamaño, irregulares. y... con esa costra de azúcar tostado y brillante en la superficie. Pregunté que de donde eran, me las dieron a probar
y... ¡Oh! estas si que eran las auténticas.

     Bueno, esta mañana le he llevado unas cuantas y le he dicho: Mira mamá, estas si que son las auténticas, se llaman "La Cacereña" y son de Carcaboso.

     - ¡Ah!, pues en Carcaboso había un muchacho con el que yo me escribía durante la guerra.

     Parece ser que en la guerra, para hacer mas llevadera la situación de los soldados y mitigar su soledad, había jóvenes que se escribían con ellos y a las que se les denominaba "madrinas de guerra".

     - Se llamaba Justo, era alto y guapo.

     El pobre murió al acabar la guerra en un accidente de coche. No ha sabido decirme en que circunstancias porque dice que ella perdió el contacto y se enteró despues por personas ajenas.

     Todo esto me lo ha contado según volviamos de Jesús. Hoy  hemos llegado tarde a Misa, lo que se dice al "humo de las velas", aunque ha hecho todas sus visitas de rigor a los diferentes altares. Despues de comprar unos caramelos para la tos y unas magdalenas hemos vuelto despacito a casa.

     Hemos llamado a Javier para felicitarle y después a tío Arsenio. Mamá le ha dicho a Javier al despedirse que le de muchos recuerdos a la familia (?). No sé que le habrá contestado él, pero me lo imagino. Tío Arsenio ha dicho que todos estaban mas o menos bien y que saludasemos a todos de su parte.

     Mas tarde ha llamado Aurelio para hablar con ella y darle el número de la lotería.

     Desde esta página le mando un abrazo a Pilar.

     Y para ella y para Jesús, mucho ánimo y mis mejores deseos para que se estabilicen cada uno en su estado. Y a los que estan a su lado mucha fortaleza para poder ayudarles.

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Cita:
"Lo malo de la inmortalidad es que hay que morir para alcanzarla".
                                                                          Victor Hugo

   

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