CASI TODO SOBRE MI MADRE, LIV

    Hoy hace una semana que mamá está con nosotros. Está mas o menos tranquila, aunque hace cosas totalmente incoherentes.

     Observándola todas las horas del día me doy cuenta de que su deterioro cognitivo aumenta de día en día y a pasos agigantados. A veces te desconcierta y mantiene una conversación mas o menos normal, pero  ¡no!, de pronto tiene una salida que te hace volver a la realidad y comprender que esto no tiene freno. 



     Ya  no es la persona autosuficiente que no quería la ayuda de nadie... ya no te habla de su casa ni de la otra casa a la que decía que tenía que llevar su ropa. La observas y parece que está en otro mundo, la mitad de las veces te ignora. Se entretiene moviendo las cosas de sitio. Hace y deshace la misma cosa ochenta veces. Confunde a las personas. En fin, es tal el cúmulo de actuaciones  incomprensibles que tiene, que no puedes perderla de vista ni un momento por temor a que se haga daño de alguna forma.

     El martes vino Aurelio a verla y quedó muy sorprendido del bajón que había dado. Comió con nosotros y estuvo aquí un buen rato. Ella le conoció, pero la verdad es que le hizo poco caso y cuando se marchó, no comentó nada.

     El jueves vinieron a verla y a cenar Alberto y Leticia, con sus parejas, y la verdad es que le estuvo preguntando a Alberto por el bebé que esperaban. Que si iba a ser niño o niña... que como se iba a llamar... pero después no les volvió a hacer ningún caso.

     El viernes subimos a casa de Cristina, a felicitar a Ana y también estuvo hablando con mis consuegros interesándose y preguntando si tenían mas nietos y por alguna otra cuestión normal.

    Ayer, sábado, vinieron mis cuñados. En esta ocasión debía creer que estaba en su casa y todo el tiempo me mandaba a sacarles algo y que pusiera una bandeja, y me señalaba los rincones diciendo que allí había muchas. Después vino su hermana Fe y le preguntó por "sus hijas" y un poco después le dijo que tenía que procurar tener otro hijo porque con una sola no estaba bien.

     Hasta aquí, mas o menos puedes comprender que con la edad que tiene, se despiste, pero luego están esos otros episodios obsesivos, por ejemplo, con la ropa. Se pasa el día abrochándose y desabrochándose la blusa... los pantalones... y a poco que te descuides está desnuda. Y luego continuamente está mojándose la cabeza y peinándose. Luego te trae el peine para que la peines tú, y no ha terminado de soltarlo, cuando empieza otra vez. Y con el trabajo que le cuesta levantarse de la butaca, no para quieta cinco minutos. Se sienta, se levanta y vaga por la casa sin rumbo. Llega al pasillo, se vuelve y vuelta a empezar. 

     Hasta ahora, con alguna salvedad, suele dormir bien. Pero esto puede cambiar en cualquier momento. 

     Y lo peor de todo es que come fatal. Toma un par de cucharadas, empuja el plato al centro de la mesa y dice que ya no quiere mas. Bueno menos esta mañana que al poco de desayunar dijo: Ponme el desayuno no?... con lo cual aproveché y... ¡¡hoy doble!!

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Frase:

"Todo el mundo quisiera vivir largo tiempo, pero nadie querría ser viejo".  Jonathan Swift