CASI TODO SOBRE MI MADRE XV

     Antesdeayer, como todos los martes, pasé con ella parte de la mañana y comimos juntas. Insiste en que me prepare yo lo que quiera porque ella ya ha comido. Claro que al final cuando ponemos la mesa se ponen dos cubiertos y come tranquilamente.

     Mientras estaba allí llamó Agustín, habló un poco con él y enseguida me pasó a mi el teléfono. Cuando colgué, me dijo:



     - ¡Ah! le podía haber dicho que se viniera a comer.
     - Pero mamá, ha dicho que está en Sevilla.
     - ¿En Sevilla? Entonces, el niño estará aquí con Angelines.
     - No sé mamá, el niño estará con su madre.
     - ¿Con su madre? pues quien es su madre?
     - Lorena, mamá. El niño es de Lorena.
     - ¡Ah! de Lorena?  ¿No es de Agustín?, me ha dicho que me lo va a traer un día para que lo vea.
     - El niño es nieto de Agustín, mamá, es de su hija Lorena.

     Se queda pensando un rato y al final acepta la explicación pero con dudas.

     Tiene un poco de lío con este niño, que es precioso, porque ya cuando operaron a Angelines de la espalda, estuvo con la preocupación de que si ella estaba en el hospital y Agustín tenía que ir a verla,  ¿Donde y con quién estaba el niño?.

      A veces me da la sensación de que nos ve a todos como si todavía estuviéramos en casa, como si no tuviéramos ya todos nuestra propia familia, nuestros hijos e incluso nietos. Dice que qué jaleo, cada uno por su lado. Y cuando le digo que todos están bien, que cada uno ha creado su propia familia, igual que hizo ella, no lo entiende y parece que está esperando a que vayan llegando uno a uno de vuelta a casa.

     Cambio de conversación  y le pregunto si ha habido alguna novedad, que si le ha llamado alguien en el fín de semana y me dice que sí que le llamó Aurelio. Que pasó el domingo en casa de Rosa Mari, que estuvieron Arancha,  Mª Eugenia y Carlos. Y que el lunes había dormido en casa de Mº Jesús.

     El día a día, es mas o menos igual. Cuando la llamo, para recordarle que es la hora de comer y le digo que me cuente lo que ha hecho en la mañana, siempre me dice que ha estado colocando los armarios y la ropa.

     Mañana iré a ver si tiene ganas de ir a Jesús. que hace tres viernes que no va porque aquí en mi barrio no hay imágen y las iglesias las abren muy temprano, están poco rato abiertas y por la tarde que hay Misa, ella no quiere salir. Aunque dice que el viernes pasado fué con Rosa Mari, que se empeñó.

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Pensamiento:

"Lo que ahoga a alguien no es caerse al río sino mantenerse sumergido en èl".   (Paulo Coelho).